Consta de Dexo, Monumento Natural

El espacio Costa de Dexo se extiende por una franja de litoral de aproximadamente 11 km de costa. Sorprende por lo abrupto del terreno situado entre dos rías, la de A Coruña y de Ares y la de Betanzos. Con una importante extensión de acantilados marinos, islotes y vegetación de herbazales y matorrales costeros en buen estado de conservación, de gran interés por su geomorfología y alto valor paisajístico.
La relevancia y singularidad de este espacio natural se ve potenciada por hallarse enclavado en el área metropolitana de A Coruña, una de las zonas más densamente pobladas y transformadas de Galicia.
Desde el punto de vista geológico, rocas metamórficas muy sensibles a la meteorización física, lo que se refleja en el paisaje de acantilados fuertemente erosionados y con perfil costero aserrado, con numerosas caletas y ensenadas, algunas terminadas en pequeñas playas encajadas, furnas (cuevas marinas) y algunos islotes (ínsua do Seixo, O Marolete, A Marola, Serrón da Torrella).
La flora es variada, en los acantilados se mantienen diversas comunidades de vegetación halocasmofítica (vegetación propia de grietas y repisas de acantilados) y en la las zonas menos abruptas, herbazales y matorrales aerohalófilos bien conservados, en los que aparecen varios endemismos galaicos,

varios de ellos sometidos a diversos grados de amenaza.
Los terrenos más elevados y alejados del mar están cubiertos en gran parte por plantaciones forestales de pinos y eucaliptos, entre los que se intercalan algunos árboles autóctonos, como robles y laureles, así como por formaciones arbustivas en las que predomina el tojo.
El espacio natural alberga una interesante y diversa avifauna propia de acantilados marinos. Entre las aves marinas, es de destacar al cormorán moñudo -hasta hace pocos años desaparecido de la zona-, la gaviota patiamarilla y el paíño común. Durante el invierno, un notable dormidero de cormorán grande en las proximidades del cabo de Mera. El halcón peregrino, el cernícalo, el vencejo real -que tiene aquí una de sus mayores colonias en Galicia-, el cuervo y la chova piquirroja son otras especies que ocupan los cantiles. En los matorrales y pinares debe destacarse la presencia frecuente de la curruca rabilarga y el chotacabras gris, entre otras muchas especies de aves terrestres.
Otros vertebrados destacables son el lagarto verdinegro y la lagartija de Bocage, entre los reptiles endémicos y muy abundantes en la zona, y la nutria y el turón entre los mamíferos carnívoros.